Naturaleza y cultura: la nueva cara del turismo

El turismo es una actividad de gran relevancia hace más de seis décadas en países en desarrollo que tienen un patrimonio natural o cultural con vocación turística. Uno de cada diez empleos está relacionado de manera directa o indirecta con este sector, una industria que ocupa el cuarto lugar en materia de exportaciones, aporta el 10.3 % del PBI mundial y tiene un promedio cercano a los 330 000 puestos laborales en el mundo, de acuerdo con la World Tourism Organization (UNWTO).

Antes de la pandemia, el sector turístico esperaba una cifra promedio de 1400 millones de turistas moviéndose a lo ancho y largo del mundo, ávidos de recorrer nuevos destinos durante sus viajes. Colombia es uno de los países que mayor número de viajeros y turistas recibe gracias a su oferta cultural y de aviturismo.

No obstante, la emergencia sanitaria derivada de la COVID-19 arroja datos en contraste que muestran la caída del turismo a nivel mundial. Para el caso de Colombia, el descenso fue de un 57.5 % (comparando los meses de marzo de 2019 y marzo de 2020, cuando se presentó la pandemia) y en la misma línea, una caída del 39.7 % respecto al tráfico aéreo.

Este año, en el marco de la conmemoración del Día Mundial del Turismo, el mensaje de la UNWTO en cabeza de su secretario general fue claro: en el aspecto económico surge la necesidad de fortalecer el mercado y consumo local; en cuanto al panorama turístico, es importante comprender que en principio se va a empezar por explorar destinos de turismo nacional más que internacional, bajo protocolos de bioseguridad que llevarán a la necesidad de obtener el sello de calidad por parte de los prestadores de servicios turísticos, como una consecuencia que nos dejó el aislamiento.

El turismo de naturaleza será uno de los beneficiados pues desde una visión de sostenibilidad invita a considerar la necesidad de identificar y salvaguardar el patrimonio natural y los recursos naturales, en una relación de armonía entre las generaciones presentes y futuras que busquen el conocimiento y disfrute de su territorio. 

También está el turismo cultural, de cara a los nuevos retos que nos dejó el aislamiento, donde emerge el interés por fortalecer el sector de las industrias culturales y creativas, uno de los más golpeados en el país, entre los que se encuentran bares, restaurantes, centros históricos, emprendimientos creativos, entre otros.

Todos los actores sumados a estos ecosistemas y cadenas de valor están con la camiseta puesta para asumir el reto, pues Colombia es un país de gente amable, cordial y alegre, que históricamente y en distintos momentos ha mostrado su talante para superar las adversidades, así que esta no será la excepción.

Por otro lado, en materia de biodiversidad a nivel mundial contamos con cerca de 54 871 especies registradas, entre ellas, 1921 especies de aves, el 20 % de todas las presentes en el Planeta; 79 % son endémicas, por lo que se ha convertido en un destino predilecto para el avistamiento de aves.

Además, el país cuenta con 2134 recursos culturales, resultado de nuestro patrimonio materializado en hábitos, costumbres, mitos y leyendas, folclor, recetas autóctonas, artesanías, yacimientos arqueológicos, legados indígenas, festivales y ferias, y miles de motivos más para seguir viajando y apostarle a encontrar, ver y disfrutar nuevas maneras de viajar.