¿Cómo cerraste el año 2022?

El hecho de despedir un año más nos lleva a revisar qué sueños, metas y objetivos logramos en los 365 días que se fueron. Por eso, hoy quiero decirte que, en esta época, y siempre, la única lista de propósitos alcanzados que debes tener en cuenta es la tuya, no la de la tía que preguntó “¿Y el novio?”, no la de la abuela que te dijo“ ¿Cuándo me darás bisnietos?”, ni la del tío que, otra vez, preguntó “¿Y cuándo será el grado?” y tampoco la del papá que hizo el comentario “¿Y la empresa nada que despega?”. Para este 2023, los compromisos y el tiempo son solo tuyos.

A veces, por no decir con mucha frecuencia, somos muy duros con nosotros mismos porque como seres humanos a nivel cerebral tendemos a fijarnos y a valorar más lo “negativo” que lo positivo.

La tendencia en mención se ve reflejada cuando a final de año vemos que a algunos propósitos no le podemos poner check porque la vida no se desenvuelve en blanco y negro, y porque hay situaciones que cambian el camino y los tiempos de lo que nos proponemos.

A esta condición humana de fijarnos en lo que no pudimos, por diferentes razones, y no en lo que sí logramos, se suman dos aspectos que la agudizan: el primero es la presión social que ejercen algunas personas que nos rodean, quienes, también en su naturaleza humana, le ponen tiempos y plazos a la vida de otros, aun cuando no debería ser así. El segundo es la tendencia de comparar nuestros procesos con los de otros, aspecto que se ha intensificado a través de las redes sociales, olvidándonos de que los tiempos de cada persona son diferentes.

"Tienes 365 días de este año para construir el hábito de, por ejemplo, separar los residuos de tu hogar de forma correcta"

Ser consciente de estos dos factores ayuda a ser más solidario con uno mismo y aprovechar el año 2023 desde una perspectiva de auto empatía para revaluar expectativas, sueños, propósitos y planes, pero siempre desde la posición de uno mismo y no desde los zapatos de otros.

Así que, si el año pasado quedaron pendientes propósitos como aportar con más acciones simples y cotidianas a que el mundo sea sostenible, tienes 365 días de este año para construir el hábito de, por ejemplo, separar los residuos de tu hogar de forma correcta. Si en el 2022 no se pudo consolidar esa idea de negocio o ese emprendimiento por el que has estado trabajando duro, tendrás unos nuevos 12 meses para seguir intentándolo hasta lograrlo.

No olvides que siempre estás a tiempo. Lo importante es hacer algo que nos acerque a lo que queremos todos los días y fortalecer nuestra capacidad de adaptación para que cuando los planes, los tiempos, los sueños y las metas cambien, sepamos abrazar esas transformaciones con empatía y amor para seguir adelante.