COP26, reflexiones de la Universidad Ean y la Fundación Natura

Noviembre 10, 2021

La Conferencia de las Naciones Unidad sobre el Cambio Climático (COP26) tuvo lugar en Glasgow, Reino Unido, entre el 31 de octubre y el 12 de noviembre. Allí se reunieron líderes mundiales, expertos y organizaciones de la sociedad civil en busca de incidir en las negociaciones y lograr compromisos que respondan a la urgencia de la actual crisis climática.

El 2020 y el 2021 han sido años difíciles para la humanidad y para el Planeta, en los que enfrentamos una de las épocas más críticas para la toma de decisiones en materia de sostenibilidad a nivel global por cuenta de dos hechos trascendentales: la pandemia por COVID-19 y el nuevo marco global para la gestión de la biodiversidad.

Particularmente, la COVID-19 afectó a la sociedad y las organizaciones en Colombia, y en el resto del mundo, de una forma que no tiene precedentes, alterando las agendas del desarrollo. Asimismo, en 2020 terminó el período de cumplimiento del Plan Estratégico del Convenio de Diversidad Biológica y sus 20 metas de Aichi que orientan, desde 2011, la agenda global sobre biodiversidad y sus servicios ecosistémicos.

Hoy, 10 años después, la comunidad internacional se encuentra definiendo una nueva ruta de gestión que logre cambios reales para superar la crisis ambiental y la degradación de la Tierra. El reto de convertir la ambición climática en acción para reducir decididamente las emisiones de gases con efecto de invernadero, antes del año 2030, se suma como otra apuesta urgente y fundamental para abordar las crisis del mundo contemporáneo y actuar sobre ellas.

Como civilización debemos hacer frente al gran desafío del cambio climático, el cual pone en jaque a toda la humanidad. Esto se debe hacer a través de acciones innovadoras y sistémicas con toda la capacidad multisectorial posible en términos de gobernanza, gestión de conocimiento, innovación y financiamiento.

Colombia, así como el sur global, es altamente vulnerable a los efectos directos e indirectos del cambio climático. Dicha vulnerabilidad contribuye sustancialmente al incremento del riesgo en términos económicos y socioambientales, dificultando la garantía de procesos de gobernanza y gobernabilidad adaptados a las condiciones de un clima que está cambiando para siempre.

Por esta razón, la COP26 es quizás la última oportunidad para cambiar el rumbo aparentemente irreversible de la crisis climática. Los países deben lograr una negociación que permita tener una ruta clara y resuelta para implementar el Acuerdo de París con mayor rapidez y efectividad, reduciendo las brechas de desigualdad en materia de adaptación, financiamiento y otros enfoques cooperativos para la mitigación de emisiones.

Desde la Universidad Ean y la Fundación Natura nos comprometemos con esta premisa, por esa razón participamos activamente en esta nueva cumbre del clima que se realiza en un contexto complejo a raíz de la pandemia. Nuestro objetivo es seguir fortaleciendo la cooperación entre ambas organizaciones y afianzar lazos con otros aliados para potenciar soluciones climáticas en los territorios colombianos a través de la investigación, la gestión del conocimiento y el emprendimiento sostenible.

A través de proyectos conjuntos, como el Bosque Ean ubicado en la Reserva Biológica Encenillo, garantizamos un aporte significativo a la mitigación de gases de efecto invernadero a través de la conservación de la biodiversidad y sus contribuciones, y potenciamos iniciativas de restauración y reforestación con especies nativas. Por otro lado, la plataforma Foresta.bio permite que cualquier ciudadano del mundo pueda acceder a una calculadora para medir su huella de carbono según sus acciones diarias en torno a la alimentación, el transporte, los residuos y la vivienda, permitiendo compensar esa huella a través de proyectos colombianos que aportan a la conservación y restauración de ecosistemas.

Ese compromiso también se ve evidenciado en reconocimientos como el certificado de carbono neutralidad entregado recientemente a la Universidad Ean por parte del Icontec; en la entrega de un campus regenerativo, que aporta a la eficiencia energética y a la innovación agroalimentaria, y en el proyecto ‘Como Con Eco’ que se desarrolla en alianza con 2811 y que se constituye en una apuesta por la educación ambiental por medio de laboratorios de resiliencia alimentaria que contribuirán a mitigar de riesgos que afectan la seguridad alimentaria y a la consolidación de acciones a favor de una cultura sostenible.

Por su parte, la Fundación Natura refuerza su compromiso de seguir transformando el vínculo de la sociedad con la naturaleza hacia modos más sostenibles para que Colombia pueda alcanzar sus metas de biodiversidad, sociales y climáticas, de una manera justa y equitativa. El que se ve evidenciado en el trabajo realizado en las cinco ecorregiones interiores y las dos marino-costeras del país junto a las comunidades locales, los actores institucionales y los actores del desarrollo sectorial para la construcción de resiliencia socioecológica ante los impactos del cambio climático.

Entre sus proyectos emblemáticos y que impulsan este objetivo se encuentran ‘Amazonia 2.0’ que refuerza la gobernanza ambiental con enfoque intercultural y es ejemplo para la consolidación de condiciones habilitantes en esta ruta hacia la sostenibilidad y ‘Magdalena-Cauca Vive’ que trabaja con enfoque socioecológico de la mano de comunidades ribereñas para fortalecer modos de vida locales y haciéndolos más resilientes ante el cambio climático.