Estudiante Eanista, dueño del rating y del ‘flow’

Una fría tarde de jueves no fue excusa para que la nueva estrella de la televisión colombiana contagiara con su calidez y buena vibra. A pesar de su corta edad, conversar con Juan Manuel Restrepo, actor protagónico de la telenovela La reina del flow, es una invitación a la reflexión y a ese mundo interior que a veces descuidamos. Conoce la faceta emprendedora y el lado más humano del Eanista que se está robando el show.

¿Qué momentos de tu vida fueron determinantes para ‘moldear’ al Juan Manuel de hoy?

Juan Manuel Restrepo (JMR): Mi familia siempre ha sido mi motor y en el 2014 enfrentamos una prueba muy fuerte. Por un lado, mi papá sufrió una crisis económica que cambió por completo nuestro estilo de vida y, por otro, mi mamá fue diagnosticada con cáncer de seno. Estas dos situaciones me llevaron a replantear mi futuro y lo que quería ser. Sabía que esto implicaba cambiar de amigos, alejarme del licor, rodearme de mejores personas y esforzarme por crear oportunidades que transformaran mi destino. Y lo hice.

¿Fue a raíz de ese cambio que te encontraste con el emprendimiento?

JMR: Así es. En ese momento me enfoqué en conocer, aprender y aprovechar al máximo mi tiempo, que es mi mayor tesoro.  Estaba en grado décimo y decidí realizar un curso de programación de software en el SENA, paralelo a mis estudios, debido a mi interés por la tecnología. Así mismo, empecé a vender toda clase de productos en el colegio. 
Aunque muchos no creían en mí, por mis antecedentes, en undécimo grado realicé un proyecto (app) enfocado en integrar los sistemas de transporte público de Medellín. Contra todo pronóstico fui el ganador y esto me permitió concursar a nivel municipal y departamental, hasta obtener el premio a mejor investigador en una feria organizada por el Parque Explora. Allí me di cuenta de algo más: la curiosidad abre muchas puertas.

¿Cuándo llegó la actuación? 

JMR: Cuando estaba en once empecé a trabajar para una agencia de modelos en Medellín. Al graduarme, viajé a Bogotá, una ciudad con muchas oportunidades y, por casualidad, logré conectarme con algunos mánager y gente del medio que vio en mí potencial para la actuación. Sin embargo, antes de participar en la novela me había presentado a dos castings y no fui seleccionado. Estuve a punto de desistir, pero fui abordado por alguien que creyó en mí y en las posibilidades que tenía de conseguir el personaje que interpreto actualmente. Aun así, no fue un proceso fácil y pasaron muchos días antes de recibir la buena noticia. Yo creo que esa es otra faceta del emprendedor, porque emprender no es solo crear empresa, sino no desistir y levantarse ante las dificultades. 

Tienes muchos talentos por explotar. ¿Alguno inclina la balanza?

JMR: Mi proyecto de vida está enfocado en desarrollar proyectos académicos, artísticos y empresariales y en encontrar estabilidad espiritual, familiar y económica. Hoy en día, mi mayor reto es administrar el tiempo para cumplir con todas las cosas que tengo por hacer. No quiero escoger entre uno u otro camino. Quiero aprovechar las oportunidades que se me presenten y lograr los objetivos que me proponga.

¿Cómo llegó la Universidad Ean a tu vida? 

JMR: Tenía en mente estudiar comunicación, ingeniería de sistemas o comercio. Sin embargo, empecé a investigar, a descartar y me encontré con el mercadeo y con la modalidad virtual. Me pareció bacano porque, además de incluir los enfoques de las carreras que quería estudiar, es una disciplina que genera valor y satisface necesidades. Además, me gustó mucho el enfoque sostenible de la Universidad.

¿Algún mensaje para tantos jóvenes que te siguen?  

JMR: Que crean en sus en sus sueños y en que pueden cumplirlos. Y que no olviden que podemos ser los profesionales más capacitados, pero si no somos humildes y no sabemos cómo comunicar ni tratar a las personas, no lograremos nada.