Conocedores, expertos e interesados de diversas procedencias participando alrededor del primer foro, el punto de partida. Entre charlas, intervenciones de aquí y allá y laboratorios de imaginación, fueron compartidas gran variedad de conocimientos e ideas con resultados gratificantes de acuerdo con las conclusiones. Resulta increíblemente enriquecedor el contar con un amplio abanico de personas involucradas durante el desarrollo de las jornadas. La participación de los agentes involucrados y la organización propuesta fue pertinente para reunir y hallar resultados valiosos. Es pertinente resaltar el aporte de 3 grupos de actores que, si bien en otros eventos son ignorados o no aprovechados en su máximo esplendor, sí resultan ser de vital importancia puesto que aportan sus conocimientos y experiencias desde su campo. Hago referencia entonces, a los niños, a la academia y a la ciudadanía.
Durante el foro, las valiosas ideas del grupo activista ambiental Guardianes de la Vida fueron expuestas. Francisco Vera Manzanares, participante y representante de 11 años durante el evento, fue el encargado de, por un lado, exponer algunas de las ideas surgidas de sus compañeros de grupo y, por otro, de “cerrar con broche de oro” la jornada el 2 de octubre. Es innegable la importancia de atender e incentivar la conformación de este tipo de espacios para niños comprometidos con el cuidado y protección del medio ambiente, puesto que son ellos la siguiente generación que estará a cargo y si buscamos generar una diferencia, lo mejor es cultivarla desde la tierna edad. Sin embargo, con los aportes de estos niños, se evidenció que no solo ellos cumplen el rol de estudiante, sino también el de expositor y promotor. Dentro de sus ideas resaltan la implementación de energías limpias en el teatro, la creación de huertas urbanas y la existencia de patos en ellas (para evitar usar pesticidas y tomando como referencia la viabilidad en algunos países europeos), la siembra de plantas con flores para atraer a las abejas, la implementación de toboganes en vez de escaleras en los teatros y la exposición de la biodiversidad desde las manifestaciones teatrales. Además, la expresión y el registro del léxico usado por Francisco, permite visualizar su conocimiento y profesionalismo con tan corta edad. Él habla acerca de “la economía lineal” y la importancia de usar alternativas. Por otro lado, durante las Jornadas de Imaginación tuvieron lugar dos situaciones importantes. La primera, la participación activa de estudiantes de pregrados universitarios organizando las actividades; y la segunda, la intervención de la ciudadanía en las mismas.
Los estudiantes universitarios deberían involucrarse con este tipo de iniciativas para aportar conocimientos desde la academia y adquirir experiencia. Los trabajos y las clases deberían ser llevadas a la práctica y puestas al servicio de la comunidad puesto que es necesario que exista ese puente entre teoría, ideas, problemas, aportes y puestas en escena. El conocimiento teórico debe salir de la academia y servir para la vida, y los estudiantes deben poder adquirir esa experiencia que seguramente le servirá para su futuro laboral. De hecho, la academia involucrada, fue una de las conclusiones de la jornada. Desde mi perspectiva, los directivos de las universidades deberían propender que se garantizaran este tipo de relacionamientos. El otro actor importante es la ciudadanía, puesto que es ella la que entiende el entorno porque vive ahí; además, piensa como espectador o consumidor, por ello desde su posición podría generar aportes que no serían vistos desde ninguna otra perspectiva. Tal y como sucedió durante las Jornadas de Imaginación. Sin embargo, es necesario mencionar que, aunque resultan en ser un actor importante, su participación en cantidad no fue tanta como se esperaba.
La estructuración de la primera Jornada de Imaginación la cual estaba enfocada en el Teatro Jorge Eliecer Gaitán. Mediante la plataforma Zoom se llevó a cabo la actividad. Dentro de la sala, y con los participantes habiendo interactuado, las organizadoras procedieron a compartir el siguiente enlace para editar: https://miro.com/app/board/o9J_kkq9x88=/. Una vez allí, explicaron el objetivo de la actividad y las diferentes zonas: el Parqueadero (para escribir inquietudes) los Ajás (ideas ocurridas para resolver una problemática). Inmediatamente después los participantes y los ciudadanos debían dar ideas para hacer del Teatro un espacio ambientalmente sustentable y luego categorizarlas en: Energías Renovables, Creación Consciente, Involucramiento Ciudadano, y otras. El tiempo previsto se agotó y el retraso en el inicio de la actividad impidieron que pudiera concluirse completamente la actividad. Pero como ideas quedaron plasmadas las siguientes: escenografías renovables, jardines interiores, boletas reutilizables, agua sanitaria procedente de aguas lluvias, muestras de arte desde donde se evidencien las propuestas sustentables, cafetería con empaques biodegradables, admisión de diferentes poblaciones, generación de sentido de pertenencia haca el teatro, uso de utilería y vestuarios reciclables o biodegradables, educación de masas acerca de la sostenibilidad y su importancia.
La participación de agentes importantes y conocedores del sector, como Jorge Melguizo (consultor en gestión pública, cultura y convivencia), sin lugar a dudas resultó vital para el desarrollo del Foro. Jorge mencionó que, con la regeneración de los espacios ambientales en los seis espacios, Bogotá sería “una ciudad contagiosa” por la calidad y dimensión de las experiencias: laboratorio cultural y responsable con el ambiente. En este sentido propone crear corredores culturales y ambientales, activar las calles para que sean escenarios culturales, crear acciones y realizar políticas públicas. Para ello, Melguizo afirma la necesidad que se lleve a cabo de manera conjunta, por lo que resalta la importancia de que los demás agentes no trabajen de manera aislada, ni de forma cultural ni ambiental. Ahora, resulta indispensable mencionar que, durante la jornada de resultados y conclusiones, el concepto de inclusión no fue únicamente mencionado, si no aplicado puesto que una mujer, se encargó de traducir todo lo dicho a lenguaje de señas. La preservación y promoción de las manifestaciones culturales más que obligación, es un querer de la ciudadanía en medio de la búsqueda de identidad. Las diversas sociedades están aprendiendo que no existe una edad o una posición para intervenir en el sector cultural y ambiental. Lo importante ahora yace en buscar relacionar los diversos agentes para que unan posiciones y conocimientos para fortalecer Nuestra Cultura.
