Febrero, mes en que se celebra el Carnaval de Barranquilla en la capital del Atlántico, la festividad folclórica más grande de nuestro país, reconocida como patrimonio de cultural de la nación en el año 2001 por el congreso nacional colombiano y también Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, concedida por la Unesco en París el 7 de noviembre de 2003.
El Carnaval de Barranquilla busca celebrar las diferentes variedades culturales y folclóricas propias del Caribe colombiano, así como distintas manifestaciones de la música y el baile local. Dentro de la gran cantidad de diferentes aspectos que abarca el carnaval, la gente no deja de ser uno de los ejes principales de esta celebración, por esto, hoy desde Catarsis quisimos conocer y compartir con ustedes algunas historias contadas por los protagonistas del carnaval, las personas.
Esta celebración hace parte de sus ciudadanos desde la infancia, así lo cuenta Angely Martínez, nacida en la ciudad de Barranquilla quién narra cómo desde el colegio, a través de la educación, incluyendo en su plan de estudios una materia llamada danza, les enseñan a sus estudiantes toda la teoría del carnaval y la historia que tiene cada baile típico como la cumbia, el garabato, y el mapalé. Adicional, ella afirma “incluso el colegio, me acuerdo, que programaba visitas al museo del carnaval, al museo de caribe donde hay también, bastante historia del carnaval” dejando como inspiración alegría, bienestar, goce, plenitud, sentido de pertenencia y ganas de realizar actividad física a través del baile disfrutando la cultura que se respira esos días.
Sin patrimonio y cultura no hay turismo especialmente el turismo cultural así lo afirma la profesora Claudia Rodríguez docente investigadora adscrita a la facultad de humanidades y ciencias sociales de la Universidad Ean quién explica que el carnaval contempla distintos tipos de subproductos; dentro de los cuales se puede contemplar el Endo gráfico que hace referencia a costumbres, tradiciones y comunidades donde perfectamente se relaciona con el carnaval que nace como una voz de la comunidad antes de volverse en el gran modelo de gestión que es hoy en día. Por otra parte, ella resalta el aspecto lúdico que está asociado al turismo cultural e indica que Colombia es un país de tradiciones milenarias que se vuelven a resignificar a partir de la transmisión oral, de las artesanías identitarias que hace presencia en el carnaval dentro de lo que las personas viven. ¡Quien lo vive es quien lo goza!
Evidentemente, el carnaval reúne personas de diferentes partes del mundo; Jorge Ariza tripulante de cabina de pasajeros explica una de las razones por la cual quiso participar por primera vez del evento “ver las expresiones tan emblemáticas para el pueblo barranquillero y todo el caribe, reconociendo que cuando se ve la mezcla de culturas y todo lo que se sustenta como la nación que es Colombia demuestra la capacidad que tiene de movilización social”. Para Ariza no deja de ser interesante la gigante tradición con la que cuenta el carnaval, una celebración que lleva en la ciudad más de un siglo y que incluso se dice que fue traída por los españoles en la época de la colonia, menciona lo importante que es esto para la gente del caribe colombiano.
Como se menciona anteriormente, es importante tener en cuenta y resaltar que este evento cuenta con declaratoria por parte de la Unesco, hace parte de la lista de patrimonio de la humanidad, esto le reviste importancia desde el punto de vista patrimonial y desde el punto de vista turístico. Del carnaval sale música para llenar de color las calles y llenar el ama; Rodríguez destaca que la celebración está preparada para recibir ciudadanos de cualquier parte del mundo: norteamericanos, europeos, canadienses, de américa latina e incluso promover el turismo doméstico.
Por otro lado, cuenta que hay buen desarrollo de infraestructura que permite el acceso a la ciudad y por supuesto menciona los retos que se presentan, por ejemplo, el tema del bilingüismo para aquellos turistas que quieran profundizar en la historia del carnaval debido a la necesidad que generan al requerir un guía turístico que los instruya sobre estos temas culturales y que busquen una muy buena experiencia también para la docente Rodríguez es importante especializar más el carnaval para así llegar y crear un impacto significativo en los visitantes con un “apetito” distinto a la fiesta y celebración.
El carnaval de Barranquilla es una tradición que históricamente ha pasado a través de generaciones, “en la casa se vuelve algo cultura llevar a los niños al desfile de los niños, a la batalla de rosas a todos los eventos en los que digamos los menores de edad pueden asistir” dijo Angely Martínez; también es importante resaltar que el carnaval reúne gente de fuera de la región caribeña. Este es el caso de Julie Castañeda quien fue llevada por primera vez al carnaval por uno de sus amigos de la región.
El carnaval por sí solo y también su gente se encargan de atraer a los nuevos visitantes, la fiesta y celebración son atractivos interesantes. Adicional, el carnaval representa una oportunidad de crecimiento cultural, “creo que sí aprendí cosas nuevas, porque el carnaval tiene todo un proceso, es conocer qué significa cada disfraz, las comparsas, cada día es diferente y ver el porqué de cada desfile y bueno es una cultura bastante amplia en relación con toda la organización de carnaval y todo lo que se deriva alrededor de él” contó Julie Castañeda.
Los datos curiosos como, por ejemplo, su origen español, el mandato de su reina o su música autóctona permite que cada persona que vive el carnaval no solo disfrute de principio a fin por ser una fiesta, sino que también, se nutra de historia y conocimiento y haga un recorrido a través del tiempo aprendiendo a valorar esa cultura caribeña dónde se desenvuelve la creatividad a través de los diseños en sus trajes que resalta el arduo trabajo de cada persona que participa del evento gracias a la clave y la puesta en valor del recurso turístico que presenta lugares como el “bar la cueva”, la arquitectura destacada de barrios de gran renombre; no se trata solamente de ofrecer el carnaval como un festejo sino un viaje a la ciudad de Barranquilla que lleva a conocer la obra cien años de soledad del nobel Gabriel García Márquez, tiendas de diseño, la ruta del artesano e incluso potencializa otros municipios del departamento del Atlántico que conlleva a consumir otro tipo de experiencias.
Estos son tan solo unos pocos testimonios de tantos que se pueden encontrar de esta celebración, el carnaval cada año se hace más grande, sin embargo, no se puede olvidar que nosotros podemos crecer con él, así como lo dijo Angely Martínez “he aprendido a valorar la cultura de la tierra donde nací”.
*Santiago Hernández es estudiante de Lenguas Modernas con énfasis en comunicación digital y periodista de Catarsis.
*Juliana Galeano es estudiante de estudiante de Lenguas Modernas con énfasis en comunicación digital en la Universidad Ean y periodista de Catarsis.
